25 ene 2011

Joaquín Gracia Ortín, antiguo pastor de Plenas

Plenas, 1988. Joaquín, apodado  "el Timoteo", con su "aterico" cargado de leña. Fue pastor durante 25 años y excelente persona. En la foto tenía 79 años de edad. Llegó a tocar el "pito" de caña. Fuente: I. Navarro

Chopera

Frondosa chopera de Plenas.

Noguera

Antigua noguera durante la época invernal.

Los músicos en las fiestas

Algunos músicos populares o bandas de música que amenizaron en Plenas las fietas fueron:
  • Delfín Gimeno Roche, "El sastre de Loscos". Tocaba guitarra y violín
  • Gaiteros de Lanzuela. Dulzaina y redoblante
  • Orquesta de Aguarón
  • Orquesta de Belchite
  • Orquesta de Encinacorba
  • Orquesta de Paniza
  • Orquesta Los Nuños. Estuvieron tocando para las fiestas de 1935 y cobraron cinco duros  (25 pesetas) a cada mozo de Plenas.

Rastreando la historia de Plenas en el Archivo Histórica Provincial de Zaragoza

Como en Plenas, durante la Guerra Civil se quemaron los archivos, no hay casi nada de documentación histórica, y a los que nos gusta la historia de nuestro pueblo, la debemos ir rehaciendo con sumo esfuerzo. Llegué al Archivo y pedí el Censo de 1890, pero lo tienen microfilmado y la maquinita estaba estopeada. Para aprovechar el viaje, pedí que me dejaran consultar el Censo de 1903. La archivera me lo saca y me dice que me lo puede fotocopiar, lo que agradezco enormemente. En este CENSO solo salen los hombres mayores de 25 años que eran los que podían votar. Hay 171 censados. Es muy interesante.  Hoy me he vuelto a acercar para consultar el Censo de 1890, que es fundamental para mis trabajos, pero, mala suerte, seguía la maquinita fastidiada. Hay otra archivera menos amable que la de ayer. Para aprovechar el viaje pido consultar el Censo de 1934, pues he supuesto que allí saldrán las mujeres y es poco antes de la Guerra Civil, cuando cambian tantas cosas… La archivera me pone todas pegas del mundo para consultarlo, que si solo se pueden consultar en microfilm, pero como no va el aparatito pues excepcionalmente me lo deja consultar, pero es tan grueso el volumen que no se puede fotocopiar. Así que me pego dos horas y media , a toda prisa, apuntando… Este censo contiene hombres y mujeres mayores de 23 años, y hay 387 censados. Cuando los iba transcribiendo, me acordaba de muchas de estas personas, a las que conocí… Pero lo que más me ha llamado la atención son las calles, pues aparece la calle de San Blas, que no se cual puede ser, ¿tal vez sean las casas que se conocen como de Blas? Y aparece gente viviendo en la NORIA DE ROMEO, este lugar es totalmente desconocido para mí… supongo que estará junto al río pero no caigo donde…  Otro día volveré a buscar el censo de 1890, a ver si hay suerte.

Plenas en Sevilla

Mapa de la provincia de Zaragoza situado en la plaza de España de Sevilla. Curiosamente, está grabado el nombre de Plenas.


Chopos cabeceros

En las riberas de los arroyos que discurren por el término de Plenas, encontramos bosquecillos de chopos cabeceros, algunos de varios cientos de años. Hasta los años 60 del siglo XX se mantenían y cuidaban pues de estos chopos se sacaban los maderos para hacer vigas de las casas, pero con el abandono de los sistemas constructivos tradicionales, los chopos cabeceros han perdido su utilidad secular y han sufrido un enorme abandono, se han talado muchísimos ejemplares de hermoso porte y los que quedan sobreviven como pueden.

La villa de Plenas participando en la Ofrenda de Flores 2007

Desde hace algunos años, un nutrido grupo de pleneros, muchos de ellos emigrados a la ciudad de Zaragoza, se reunen, vestidos de baturros, para asistir juntos a la Ofrenda de flores a la Virgen del Pilar. En esta ocasión han acudido unos 30 o 40.
Es un emotivo acto que sirve para juntarse la gente y ayuda a mantener la identidad de nuestro pueblo, que aunque pequeño de habitantes, es grande en iniciativas. El grupo llevaba un estandarte con la Virgen del Carrascal pintada y a la cabeza iba su alcalde Baltasar Yus.







21 ene 2011

Amillaramientos de Plenas en 1862 (1ª parte)


En el Archivo Histórico Provincial se encuentra un documento sobre amillaramientos de Plenas del año 1862. Hay muchísima información que se irá publicando por partes y en esta primera, ponemos un resumen del documento y algo de ganadería.

RESUMEN
En el documento vienen las tierras clasificadas en tres categorías, 1ª, 2ª y 3ª.
La superficie viene dada en cahices, anegas y almudes.
Las casas también, pero hay otra categoría inferior, la 4ª.
Los animales también vienen en 3 clasificaciones.
Según la categoría pagan más o menos contribución pues este amillaramiento se hacía para cobrar luego a los propietarios.
El amillaramiento se hizo por una comisión formada por varios vecinos del pueblo y funcionarios.
Se acabó el 6 de julio de 1862.
Era alcalde de Plenas Joaquín Marteles y secretario Gregorio Serrano.

Propietarios
Propiedad rural: 427 (de ellos eran vecinos de Plenas 153, el resto residen en otras localidades y tienen tierras en el término de Plenas).
Propiedad urbana: 161.
Ganadería: 97.
El mayor propietario de tierras de Plenas, y también el mayor ganadero es Mateo Luño.

RESUMEN
Tierras de regadío dedicadas a trigo, cebada y otras semillas
De 1ª: 11 cahices, 0 anegas y 4 almudes
De 2ª: 12 cahices, 5 anegas y 10 almudes
De 3ª: 24 cahices, 4 anegas y 3 almudes

Árboles sueltos
Tierras de riego de invierno destinadas a trigo, cebada y otras semillas
De 1ª: 28 cahices, 4 anegas y 6 almudes
De 2ª: 2 cahices, 2 anegas y 3 almudes
De 3ª: 0 cahices, 6 anegas y 4 almudes

Tierras de secano destinadas a trigo, cebada y otras semillas
De 1ª: 77 cahices, 3 anegas y 0 almudes
De 2ª: 805 cahices, 3 anegas y 6 almudes
De 3ª: 3.156 cahices, 1 anegas y 4 almudes

Viña
De 1ª: 8 cahices, 1 anegas y 11 almudes
De 2ª: 38 cahices, 7 anegas y 9 almudes
De 3ª: 79 cahices, 3 anegas y 1 almudes

Dehesa de pastos: 37 cahices

Azafrán
744 cahices
62 cahices (de plantación)

Eras de trillar
De 1ª: 6
De 2ª: 24
De 3ª: 30

Edificios
Casas de habitación dentro del pueblo: 293
Casas de labor en campo: 30
Molinos harineros,1

GANADERÍA
Sorprende los pocos cerdos que hay, y que no aparezcan gallinas, conejos, patos, y tampoco aparece ninguna cabra. Sí que aparecen varias vacas y 41 palomas ¿Contarían una a una las palomas? Había mucho asno y mucha mula.


Ovejas,1849
Mateo Luño: tiene 450 ovejas.
Francisco Luño Bailo: 216 ovejas
Antonio Luño: 208 ovejas
José Gabasa Sancho: 208 ovejas
Mariano Luño: 173 ovejas
José Marteles: 102 ovejas
Gabriel Gabasa: 80 ovejas
Melchor Luño: 80 ovejas
Pedro Sancho: 70 ovejas
Manuel Martín: 70 ovejas
Nicolás Ortín: 56 ovejas
Juan Herrando: 32 ovejas
Ambrosio Pérez: 30 ovejas
Jorge Ortín: 21 ovejas
José Ortín Rodrigo: 16 ovejas
Francisco Sancho, 15 ovejas
Macario Ambroj: 10 ovejas
Juan Mingarro, menor: 6 ovejas
José Gabasa Yus: 2 ovejas.
Manuel Romeo: 2 ovejas
Valero Marteles: 2 ovejas

Vacas
De 1ª: 1
De 2ª: 6
De 3ª: 1

Mulos
De 1ª: 16
De 2ª: 32
De 3ª: 23

Yeguas y caballos
De 1ª: 3
De 2ª: 14
De 3ª:  6

Asnos
De 1ª: 11
De 2ª: 38
De 3ª: 40

Cerdos
DE 1ª: 4
DE 2ª: 2
DE 3ª: 3

Palomas: 41

Listado de propietarios del pueblo
1. Antonio Lascasas
2. Antonio Solanas
3. Agustín Gracia
4. Andresa Yus
5. Antonio Martín
6. Antonio Mingarro
7. Antonio Bonafonte
8- Antonio Gracia Quico
9. Antonio Marteles
10. Ambrosio Pérez
11. Antonio Luño
12. Andrés Mingarro
13. Benito Marteles
14. Bernardo Serrano
15. Blas Sancho
16. Clemente Marteles
17. Clemente Sancho
18. Clara Martín
19. Dionisio Gracia
20. Esteban Bailo
21. Felipe Huete
22. Francisco Luño Marteles
23. Francisco Bonafonte, mayor
24. Francisco Villanueva
25. Francisco Sancho
26. Francisco Marteles
27. Francisco Gracia Quico
28. Francisco Luño Bailo
29. Gabriel Gabasa
30. Gaspar Señalada
31. Gregorio Lascasas
32. Gregoria Sancho
33. Gregorio Serrano
34. Genaro Villanueva
35. Inocencio Yus
36. Ildefonso Mingarro
37. Ignacio Luño
38. Juana Martín
39. Jorge Ortín
40. Juan Manuel Luño
41. José Yus, menor
42. José Sancho
43. José Lázaro
44. José Marteles
45. Joaquín Luño
46. Juan Villanueva
47. José Gabasa Sancho
48. Joaquín Marteles
49. José Ortín Rodrigo
50. Javier Gabasa
51. José Gabasa Yus
52. Javier Herrando
53. Joaquín Villanueva
54. José Gracia Pilaro
55. Joaquín López
56. Juan Domingo
57. José Artal
58. José María Gracia
59. Julián Gracia
60. Juan Mingarro Bailo
61. Juan Mingarro, Menor
62. José Yus Mayor
63. Juan Antonio Martín
64. José Mingarro
65. José Ortín Couto
66. José Gracia, esquilador
67. José Bailo
68. José Abadía
69. Juan Gracia
70. Luisa Yus
71. Lorenzo López
72. Lucas Navarro
73. Lorenzo Bailo
74. Lorenzo Solanas
75. Manuel Luño
76. Mariano Serrano
77. Manuel Martín
78. Manuel Gracia López
79. Mariano Mingarro
80. Melchor Bonafonte
81. Mariano Cortés
82. Miguela Yus
83. Mariano Bonafonte
84. Mariano Bonafonte (administrador de Antonio Solanas)
85. Manuel Gracia Solanas
86. Manuel Ortín
87. Martín Naval
88. Mariano Luño
89. Miguel Sancho
90. Melchor Luño
91. Miguel Bailo
92. Manuel Navarro
93. Manuela Martín
94. Mateo Luño
95. Mariano Sancho
96. Miguel Plou
97. Manuel Lorente
98. Manuel Sancho
99. Macario Solanas
100. Manuel Romeo, mayor
101. Manuel Romeo, menor
102. Macario Ambroj
103. Manuel Martínez
104. Matías Cortés
105. Manuel Mingarro
106. Miguel Gracia Quico
107. Miguel Ortín
108. Manuel Cólera
109. Mariano Gracia
110. María Cortés
111. Manuela Sancho
112. Matías Mingarro
113. Nicasio Ornaque
114. Nicolás Sancho
115. Nicolás Ortín
116. Pedro José Simón
117. Pascuala Villanueva
118. Pedro Miguel Sancho
119. Pedro Sancho
120. Pabla Cortés
121. Pedro López
122. Pedro Lacasa
123. Paulino Abadía
124. Pedro Estella
125. Pascual Sancho
126. Paulino Bailo
127. Pascual Solanas
128. Pupilas de Benito Martín
129. Ramón Peña
130. Ramón Bailo
131. Roque Solanas
132. Rosa Lacasa
133. Santiago Clemente
134. Tomás Bailo
135. Tomás Ortín
136. Tomás Martínez
137. Tomás Cólera
138. Valero Marteles
139. Valero Ortín
140. Viuda de Manuel Bonafonte
141. Viuda de Andrés Lacruz
142. Ventura Martín
143. Vicente Martínez
144. Viuda de Domingo Gracia
145. Viuda de Antonio Domingo
146. Viuda de Ignacio Sancho
147. Valero Estella
148. Viuda de Dionisio Sancho
149. Valero López
150. Vicente Gracia
151. Viuda de Antonio Sancho
152. Vicente Sancho
153. Viuda de Mariano Herrando

20 ene 2011

Bodas de oro: Florencio y Antonia

Florencio Villanueva (antiguo molinero) y su esposa Antonia, celeban sus bodas de oro. ¡Enhorabuena!

19 ene 2011

Excitación en Plenas

Diario de Huesca
26/08/1905, página 2
Excitación en un pueblo
El alcalde de Plenas ha puesto en conocimiento del gobernador de Zaragoza la excitación producida en el vecindario con motivo de haber destruido por orden del Juzgado, unos malecones instalados en el río y contra cuya obra habían recurrido los vecinos de Moyuela.
Según dice el alcalde, gracias a su tacto y al celo de la Guardia Cvil, no hubo que lamentar desgracias personales, si bien los amotinados desacataron al Juzgado.


Diario de Huesca

¡Ahí ti!

Accésit del "V Premio Anual de Composición y Recuperación de Música Popular Aragonesa Comarca Campo de Belchite". Diciembre 2009. Modalidad. Composición. Estilo: Rumba Autor: José Luis Blanque Herrero

A las birlas

Accesit del "II Premio Anual de Composición y Recuperación de Música Popular Aragonesa Comarca Campo de Belchite". Diciembre 2006. Dedicado a las birlas e Plenas. Modalidad: Composición. Autor: Francisco Jesús López Báguena

El corredor de Plenas

Primer premio del "II Premio Anual de Composición y Recuperación de Música Popular Aragonesa Comarca Campo de Belchite". Diciembre 2006. Dedicado a Elíseo Gracia. Modalidad: Composición. Autor: Pepín Banzo Salvo

El reinao, El ramplamplán

Primer premio del "I Premio Anual de Composición y Recuperación de Música Popular Aragonesa Comarca Campo de Belchite". Diciembre 2005. Modalidad: Recuperación. Autor: Luis Miguel Bajén García

Vals de La Sardeta

Segundo premio del "I Premio Anual de Composición y Recuperación de Música Popular Aragonesa Comarca Campo de Belchite". Diciembre 2005. Modalidad: Composición. Autor: Ignacio Alfayé Soriano

El baile de la tía Isidra

En Plenas como en otros muchos lugares y siempre que el tiempo lo permitiera, era costumbre organizar grandes bailes. Los domingos y “fiestas de guardar”, eran esperados por los mozos y mozas, con el fin de asistir al baile y encontrar novia o novio.
Bastante complicado era mantener relaciones y mucho menos, prematrimoniales. Sus viejas costumbres relacionadas con el noviazgo estaban marcadas de espiritualismo y de prejuicios decorosos, ambos difíciles de modificar, sobre todo en la vida rural de aquéllos años y una vez finalizada la guerra civil.
Muy pocos disponían de aparatos radio, ni picús –tocadiscos–, a la sazón, se las tenían que componer con mozos que tocasen algún instrumento musical, por difícil o raro que fuese. Muchos de ellos heredaron la formación musical de sus padres y abuelos, así  animarían los bailes, de esta manera, se garantizaba que no faltaría la música. Siempre tocaron “de oído”, sin partituras ni pentagramas, solamente guiados por una enorme afición que les hacía ser apreciados por los demás. Algunos, los más relevantes, fueron oídos fuera de estos recónditos lugares, llegando incluso, a ser reconocidos como excelentes músicos.
Los músicos eran contratados por la “tía Isidra”, que era la dueña del local que se había habilitado para este fin. El local del baile, situado en los bajos del café, era un salón de forma cuadrangular con una enorme columna en el centro que sostenía el piso del establecimiento. Se accedía desde la calle por una pequeña puerta y escalera construida con argamasa de yeso en basto. Bajando la escalinata, a la derecha, se hallaban tres bancos de madera adosados a las paredes, en los cuales se sentaban las mozas esperando ser “sacadas a bailar”. En la pared situada enfrente de la escalera, había dos ventanas de madera, lindantes a la acequia molinar, justo en la entrada de la balsa del molino harinero. A la derecha de la escalera, había una puerta con un pequeño cuarto que daba salida a la acequia molinar, en la misma pared que las ventanas del salón. En este apartado, la tía Isidra tenía una pequeña tienda, donde vendía golosinas o frutos secos. En ésta misma pared, en el rincón, se encontraba una pequeña estancia hendida en la pared y a un metro de altura del suelo. En él se sentaban los tres o cuatro músicos que normalmente acudían a tocar. Sobresalía de la pared una tabla que servía de descanso para las piernas.
Para acceder a la tabla, existía una hendidura en la pared que a modo de huella colocaba el pié el músico, a la vez que se impulsaba agarrando un gancho de hierro, situado a más altura.
El baile comenzaba a las tres o tres y media de la tarde y a él acudían mozos y mozas con la más precisa puntualidad, dado que la noche se echaba sobre las seis de la tarde y se carecía de luz artificial.
En la puerta del baile –en la calle–, quedaba toda la chiquillería del pueblo. De vez en cuando y aprovechando que las mozas y mozos bailaban, entraban en el local correteando, hasta que su presencia era detectada y eran expulsados a gran velocidad. Luego irían con chismes a sus casas, contando que si fulana bailaba con fulano e inventando en sus corros fantásticas historias de amor.
De vez en cuando los músicos bajaban del escenario para echarse algún que otro bailoteo con sus correspondientes novias. En el transcurso del baile también se encargaban de cobrar la entrada a los mozos, ya que las mozas no pagaban.
Antes de la guerra civil, el costo de la entrada era de un rial –real– (25 céntimos) y pasada la contienda lo subieron a dos pesetas. Del dinero que recudaban se hacían tres partes: una era para la dueña del local y el resto, se lo repartían entre los músicos. Contaba un músico, que antes de la guerra, se llegaban a repartir tres o cuatro pesetas para cada uno, una vez descontada la parte del local.
Entonces no había electricidad alguna (no había luz) y cuando anochecía, el lucero –persona encargada de activar la luz–, iba encendiendo con su larga pértiga las farolas emplazadas por algunas esquinas del pueblo. Los chavales que se encontraban en la puerta del baile gritaban: ¡la luz!, ¡la luz! Palabras mágicas que al ser oídas por las mozas, ellas las volverían a repetir en el interior del baile, dando por finalizado el mismo. Rápidamente desaparecían del local mozos y mozas, aún sin acabar la pieza que se estaba interpretando. Si en el momento de dar la luz no acudían ligeras a sus casas, las consecuencias podrían acarrear alguna que otra bronca.
En el baile se tocaban: chotis, mazurcas. pasodobles, polcas, valses, zambras gitanas… lo curioso es, que según cuentan, nunca jotas. Las jotas se bailaban sueltos y eso no les compensaba.
Recuerdan algunas melodías de hace 60 ó 70 años: María de la O, ¡Qué guapa estás María!, Él vino en un barco, La Parrala, Ojos negros, Francisco Alegre, Mañana por la mañana te espero Juana…, Sólamente una vez, Cachito, cachito, cachito mío, Siboney, Amapola, Bajo el cielo de la luz crepuscular, Y tú y tú y solamente tú, Cabaretera, Recuerdo aquélla vez que yo..., Qué bonito es Barcelona, Madrid, Madrid, Madrid, entre otras.
Cuando hacían el relevo o cambio de pareja los músicos tocaban un sonoro timbre. Cuando sonaba, todo el mundo debería cambiar de moza.
Aparte de domingos y festivos, los mozos y mozas aprovechaban cualquier acontecimiento para celebrar bailes. En época de zafranes –recogida del azafrán– venían muchas jornaleras de fuera para realizar los trabajos de recolección y esbrinado del azafrán. Todos los días se hacía baile en el mismo local.
Cuando llegaban las cuadrillas de esquiladores de ovejas (que por norma procedían de Alcalá de la Selva -Teruel-), se aprovechaba para hacer bailes, pero en esta ocasión se celebraba en plena calle, “junto al último tajo de los rapadores”. A veces, ellos mismos sacaban sus propios instrumentos musicales (guitarras, laúdes…) que habían transportado desde sus lugares de origen y organizaban la fiesta; si no llevaban ninguno los “pedían entre los vecinos del pueblo”.
En una ocasión, finalizada la guerra civil contrataron a una compañía ambulante que interpretaba canciones de ópera y zarzuela. El concierto se celebró en el baile del “tío Serapio” (anteriormente de Isidra) y relatan, que acudió mucha gente. Cuando llegaron a Plenas pensaron quedarse poco tiempo, pero al comprobar que gustaban las canciones que interpretaban y sobre todo, la hospitalidad de sus gentes, alargaron su estancia durante algunos días más.
Por los años 60 el baile se celebraba en los bajos de la casa de David “el Leches”, pero sirviéndose de un tocadiscos. El baile de David y la Gloria (su esposa) se encontraba cerca del local de la “tía Isidra” y se accedía por una puerta lindante a la acequia molinar.
© Ignacio Navarro

Accésit del "VI Premio Anual de Composición y Recuperación de Música Popular Aragonesa Comarca Campo de Belchite"
Autor: Javier Aparicio Aparicio

Las Tarayuelas

Accésit del "VI Premio Anual de Composición y Recuperación de Música Popular Aragonesa Comarca Campo de Belchite". Modalidad: Composición. Jota dedicada a Plenas. Diciembre 2010. Autor: Santiago Pellicer Miranda

Pasodoble de Plenas

Accésit del "VI Premio Anual de Composición y Recuperación de Música Popular Aragonesa Comarca Campo de Belchite"
Autor: Adrián Gil Sediles

La rumbeta de Inazio

Accésit del "VI Premio Anual de Composición y Recuperación de Música Popular Aragonesa Comarca Campo de Belchite"
Autor: Pepín Banzo Salvo

Niña de Plenas


Tercer premio del "VI Premio Anual de Composición y Recuperación de Música Popular Aragonesa Comarca Campo de Belchite"
Autores: David Aznar García y Fernando Daniel Ariza Barra
Entre jaras y sabinas
entre espigas y ontinas
se despierta hoy la niña
hoy la niña soñará.

Con el viento van sus sueños
con el viento volará
el recuerdo de aquel niño
que una vez la quiso amar

Por los altos de La Plana
un día lo vio marchar
hoy su pelo ya es de plata
se tiñó al esperar.

La Virgen del Carrascal
de negro vistió esa tarde
luces de ocaso: ya no volverá
nadie ya soñará.

Con su sombra una encina
cubre de polvo y cenizas
ahora están juntos ya nadie podrá
separarlos ya más.

Cuántas veces he rondado
a las mozas de Belchite
cuántas veces he rondado,
ya no las rondaré más.
Que en Plenas me he enamorado
que en Plenas me he enamorado
a las mozas de Belchite.