El vino de Plenas

El día 22 de febrero de 1991, a las 8 de la tarde, se celebró una reunión en el Colegio Oficial de Químicos de Zaragoza, en la cual se degustaron varios vinos elaborados en Plenas (Zaragoza).

Se probaron cuatro vinos:

–Tinto de 1990 elaborado por Manuel Cortiñas, el Gallego.

–Tinto de 1990 de Eliseo Gracia.

–Tinto de 1990 de Antonio Ortín, el Chato.

–Tinto de 1990 con madre de 1986, de Nicolás Gracia.

Tinto Cortiñas

Pisado el 13 de octubre de 1990 y sacado del trujal el 15 de noviembre de 1990.

–Color brillante, tiene mucho color.

–Olor, huele tal vez a madera húmeda. Olor ligeramente desagradable al principio, como si hubiera estado en una cuba vieja. Recuerda el olor de las bodegas del siglo pasado.

–Sabor, con acidez de unos tres grados.

–Graduación, unos 13º y medio.

Este vino de sabor está más equilibrado que los otros.

De los probados es el más sorpresivo y el más original, pero el olor les parece a algunos bastante fuerte.

Tinto Eliseo

–Color muy brillante, exagerado

–Olor parecido al de Cortiñas.

–Sabor más astringente y áspero. Recuerda a un vino que se elabora en Galicia. Está un poco dulce, tal vez ha estado con levaduras de poco poder fermentativo. Para algunos, este vino es mejor que el de Cortiñas. Es más fuerte.

Tinto Antonio Ortín

Es un vino más seco, tiene menos grados que los otros dos. Es más parecido al que consumimos habitualmente de una cooperativa, por eso tiene menos personalidad que los otros y es menos agresivo. Deja un sabor que lo diferencia de los normales. Este vino es más acorde a los gustos actuales. No tiene aroma especial.

De otra botella de este vino, tal vez estaba en otra vasija, el sabor es más picante y más ácido y el olor recordaba un poco a los capazos.

Tinto Nicolás Gracia

Arsenio dice, que el vino de Nicolás (madre de tres años ) es muy bueno para tomarlo con “migas” y “rancho”, pero no tanto para consumirlo con “carne asada”.

Apreciaciones y consejos dados sobre el vino de Plenas

Para el vino se puede utilizar metasulfito; para el denominado “ecológico” permiten hasta 50 miligramos. Hay gente que es partidaria de usar y añadir sulfuroso al vino.

El vino requiere mucha limpieza, cualquier cosa que tenga el trujal y la cuba, el vino la recoge.

Lo primero, cuando probamos un vino es el color, tiene que tener buen color, luego es el olfato y por último el gusto. Algunos dicen que hasta el oído es importante en la apreciación del vino, el ruido que produce al caer en el vaso.

La temperatura de fermentación conviene que no pase de 25 grados, se sugiere para enfriarlo que se haga discurrir el mosto que está fermentando por tuberías a un tanque de agua para que lo vaya enfriando.

De color, los vinos de Plenas son preciosos. Tienen originalidad y no habría que quitarles la personalidad. Tal vez, tener fermentando el vino un más o más con el orujo, sea demasiado; con ocho o diez días oreen que es suficiente y luego pasarlo a una cuba de acero inoxidable para que se produzca la segunda fermentación.

Cuanto menos tiempo esté con el hollejo, más claro tendrá el color.

Quizás, las vasijas que se usan en Plenas sean demasiado viejas. Una vasija no conviene que tenga más de 8 ó 10 años. Siempre que se vacíe una vasija de vino, hay que dejarla tal cual, con los posos y suciedad que queden y cuando se vaya a meter vino dentro, se limpia y nada más limpiarla, se introduce el vino.

Para no tener problemas con el tufo, se puede instalar un extractor en la bodega.

Es conveniente hacerse con un densímetro. Cuando el densímetro marque 1.000, 1.010 ó 1.020, se puede sacar el vino de la primera fermentación a los ocho o diez días, dejándolo que cuezca con el hollejo en cubas abiertas.

El vino seco tiene que tener en el densímetro 0,992 o menos, si llega a 1.000 tendrá azúcar reductor.

Según la temperatura de fermentación que se alcanza, hay levaduras que tienen poco poder fermentativo.

“El olor del vino de Cortiñas, es un poco la personalidad del vino”. Es mejor promocionar vinos con cierta personalidad que no más normales. Tal vez si se aireara un poco el vino perdería algo de ese olor tan fuerte, pero habría que consumirlo inmediatamente.

En líneas generales, creían que iban a de gustar vinos bastante peores pero les ha sorprendido gratamente